lunes, diciembre 31, 2007

LA VIDA ES CORTA . FELICIDADES 2008

La vida es corta:

El hombre está construido de tal forma,que en la naturaleza de los seres con vida el quiere creer que es lo máximo; y aquí vienen las reflexiones que se cierran con la pregunta ¿será?.

Sus capacidades intelectuales o de inteligencia le han permitido en la escala evolutiva dar el paso para responder ¿quién soy?,¿que quiero? y ha desarrollado teorías y técnicas preguntándose ¿porqué?, ¿cómo?, ¿dónde?... acerca de las contingencias y fenómenos en su entorno.

Sus capacidades de abstracción ejercen sobre una variable denominada tiempo acciones cíclicas que le permiten ubicarse en el paso de su vida, así logra entender un poco el ayer. Sí, la historia de su especie y sus distintas etapas de aprendizaje individual y social; aquí está el punto de reflexión, genéticamente cada ser humano cuenta con el código de la historia completa de la especie, socialmente la dinámica para la construcción y organización de millones de individuos lo tiene atorado, enredado,confundido, desintegrado, confrontado en juegos de doctrinas ideológicas que van y vienen siempre con seguidores que terminan luchando por imponer su falacia ; otros experimentando el poder y supremacia por ser capaces de engañar y explotar a multitudes por tiempo indefinido.

Contamos con la capacidad para entender que somos producto de una historia y evolución genética y social pero además eso nos ubica en el aquí y en el ahora para mostrar y para mostrarnos que el tiempo vale oro, porque nada más y nada menos ese tiempo es vida, vida, vida... utilicemos nuestras vidas para hacer a este mundo mejor en el 2008. ¡FELICIDADES!
Miguel Bonome V.

sábado, diciembre 29, 2007

CORTO DOCUMENTAL LA RESISTENCIA

Astillero Tv.

parte 1:



parte 2:


viernes, diciembre 28, 2007

2008 "Enorme Desafio".

La Jornada

Luis Javier Garrido


La mafia
El gobierno panista ilegítimo de Felipe Calderón está festejando de manera anticipada que el año próximo va a poder cumplir con la encomienda que tiene de los grupos minoritarios que prevalecen por sobre los derechos del pueblo mexicano y que, tanto por la vía de los hechos como de los cambios legislativos defendidos por el PRI, va a darse la vuelta a una página de la historia mexicana.
1. Los grupos de seudoempresarios y políticos panistas y priístas que se han adueñado del poder económico y político en el país con el señuelo de “la alternancia”, concentrando una riqueza sin precedentes en la historia mexicana y en el contexto latinoamericano, no ocultan que en su proyecto 2008 sería el año en que culminarían la destrucción completa del Estado surgido de la Revolución Mexicana, en particular con tres medidas: la privatización total de Pemex, la reforma laboral que constituiría la cancelación de los derechos sociales de los trabajadores, y la entrada en vigor del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el TLCAN o NAFTA.
2. El proyecto que pretenden culminar a partir de enero no es, sin embargo, como pretenden los medios, el de “la modernización” del país por la vía de la imposición del modelo neoliberal, ni el de la destrucción de un proyecto político y social supuestamente anacrónico, como dice la derecha fanatizada. Es, simple y llanamente, el del desmantelamiento total del Estado nacional, pero también, y ésa es la cuestión central, de la nación mexicana.
3. Un país que haya entregado a las multinacionales sus riquezas vitales, empezando por el petróleo y la energía eléctrica; que cede el control de sus espacios estratégicos desde las fronteras y costas hasta el territorio en su conjunto al gobierno de Estados Unidos; que busque deliberadamente con sus políticas terminar con los campesinos mexicanos, cancelando la viabilidad de la propiedad comunal, del ejido y de la pequeña propiedad agrícola; que condene a la muerte o el ostracismo a una tercera parte de su población; y que en una pendiente de terror cancele los derechos fundamentales de las mayorías, no tiene ya futuro alguno.
4. Ése y no otro fue el proyecto de los gobiernos priístas de Miguel de la Madrid, de Carlos Salinas de Gortari y de Ernesto Zedillo, así como del panista Vicente Fox. Y ése, y no otro, es el proyecto del también panista Felipe Calderón, quien actúa como un pelele de esos grupos minoritarios coludidos con los intereses de las grandes corporaciones trasnacionales que ven a México como un botín.
5. La viabilidad de México como una nación independiente con un proyecto propio se terminaría por muchas décadas de triunfar esta tentativa y eso significa que muchas generaciones estarían condenadas a tener que emigrar del país o a sobrevivir en condiciones infrahumanas, pues no tienen cabida en el modelo neoliberal, que preconiza en última instancia que hay que eliminar a los menos aptos y capaces: es decir, a millones de mexicanos pobres. Más de 10 millones de mexicanos, nacidos en territorio de México, y que han tenido que huir del país por la imposición de las políticas neoliberales empujadas por panistas y priístas en los últimos cuatro sexenios, residen en Estados Unidos y más de 650 mil saldrán del país en 2008, según el estudio publicado ayer en La Jornada. Y los que se queden deberán aprender a vivir sin derechos sociales y con sus garantías individuales mermadas.
6. Los beneficiarios de las nuevas políticas que se consolidaron con la entrada en vigor del TLC o NAFTA en 1994 han sido los amigos de Fox y de Salinas, según señaló Mario Di Constanzo, titular de Hacienda del “gobierno legítimo”, pues en estos 14 años incrementaron sus fortunas por lo menos 10 veces mientras en el país se produjo la pérdida de 4 millones de empleos rurales, ya que pasamos de 9 a casi 5 millones de campesinos, pues si 25 mil campesinos atravesaban ilegalmente al año la frontera hoy, según cifras oficiales, son esos más de 650 mil. La tortilla aumentó su precio 700 por ciento y la carne de res, pollo y cerdo más de 70 por ciento, mientras el ex secretario de Agricultura de Fox, Javier Usabiaga, El rey del ajo, tiene ahora 10 mil hectáreas donde laboran 5 mil personas (Milenio Diario del 27 de diciembre).
7. “La transición democrática”, como se sabe, fue el proyecto lanzado al mundo a finales de los años 70 por el Pentágono, durante el gobierno de Ronald Reagan, para terminar con los excesos de algunos regímenes a cambio de instaurar gobiernos autoritarios de derecha revestidos de una aparente “legitimidad” que propiciaran el verdadero cambio: la instauración de políticas económicas y sociales que liquidaran los Estados nacionales y entregaran todo el poder a las corporaciones multinacionales
8. La cancelación de una serie de derechos fundamentales de los mexicanos con una reforma constitucional en materia penal que está ahora discutiéndose, y que tiende a sustentar un Estado policiaco al cancelar la inviolabilidad del domicilio, no puede, por lo mismo extrañar, pues la mafia en el poder quiere todas las seguridades para proseguir este proyecto depredador.
9. La boda de Humberto Moreira, gobernador de Coahuila, quien reunió el viernes 21 en Piedras Negras a la crema y nata de la “mafia política” priísta, incluyendo a gobernadores y legisladores federales, que encabezados por Manlio Fabio Beltrones (líder priísta en el Senado) y el jefe de la gran mafia tricolor Carlos Salinas de Gortari llegaron en 35 aeronaves privadas custodiados por el Ejército federal y todo tipo de corporaciones policiacas, fue una demostración de la prepotencia e impunidad del priísmo y de quienes cogobiernan al país junto con el hampa panista, y aunque cuatro de los aspirantes del PRI a Los Pinos para 2012 estaban ahí, también estaba el artífice de la reconversión del sistema en nombre de los intereses dominantes, quien ha convenido con el gran capital que el mejor modelo político es el actual: con un panista en Los Pinos que funja como una marioneta de esos intereses y pretenda simbolizar que todo ha cambiado.
10. El pueblo de México está frente a un enorme desafío, pero, como en otros momentos de su historia va a salir adelante, pues esto no se acaba hasta que se acaba.

domingo, diciembre 23, 2007

HUASTECA

Las raíces de nuestra cultura son fuertes,admirables,los rostros muestran lo que es la verdadera grandeza,el contraste entre la pobreza material y la gran presencia del humano que trasciende a la injusticia, a la ambición a la explotación.

Petróleo. "Contratos anticonstitucionales".

La Jornada

Antonio Gershenson gershen@servidor.unam.mx

¿Qué clase de privatización petrolera quieren?

Se han publicado declaraciones e indicios de funcionarios y en reportajes. De una u otra manera, se habla de introducir a empresas extranjeras, aún más de lo que están, a la industria petrolera nacionalizada.
Me voy a referir a declaraciones de senadores, dado que es en las cámaras donde se legisla. No sólo a lo último y recién publicado, sino a por lo menos una declaración anterior. El pasado 15 de noviembre vimos en la edición de Internet de este diario unas afirmaciones del priísta Francisco Labastida, presidente de la Comisión de Energía del Senado, diciendo que se trataba de, sin modificar la Constitución, impulsar la participación privada en ciertas áreas de Petróleos Mexicanos (Pemex). En esto se implica que, siendo un órgano legislativo, se modificaría la ley reglamentaria.
El pasado jueves se publican afirmaciones de otro senador de la comisión, ahora del PAN, diciendo, como ya es sabido, que hay declinación en las reservas probadas y en la producción petrolera. Él lo atribuye a la falta de inversión, y aunque se menciona que es el régimen fiscal de Pemex el que lo ahoga, dice que este organismo tendría dinero para exploración y producción si reduce sus gastos en refinación, oleoductos y distribución del combustible. Y plantea que la inversión privada ocupe ese lugar que Pemex dejaría. Entonces las trasnacionales entrarían a refinerías, ductos y distribución (parte de la cual ya fue privatizada).
Este pretexto no sólo revela que lo puso un derechista, un reaccionario, sino también un ignorante de la industria petrolera. Si está en la Comisión de Energía, debería por lo menos hacer su tarea. El hecho es que, el año pasado, de la inversión total de Pemex, que fue de 207.5 miles de millones de pesos, la de Pemex Exploración y Producción abarcó, como ha sucedido durante años, la absoluta mayoría, en este caso 151 mil millones. Y la de Pemex Refinación fue de sólo 18.5 miles de millones, 12 por ciento que la de exploración y producción. En años anteriores fue de 10 por ciento, no del total sino de lo gastado en exploración y producción. Quitarle una parte a refinación no le ayudaría nada a exploración y producción. Sólo a las trasnacionales y a los funcionarios beneficiados por el agradecimiento de las mismas.
Vemos la confabulación PRI-PAN. Tenemos el antecedente, en la industria eléctrica, de la reforma de Salinas al artículo tercero de la Ley Reglamentaria del Servicio Público de Energía Eléctrica. Esta ley abrió el paso a que ahora casi un tercio de la electricidad para servicio público provenga de plantas generadoras de propiedad privada, todas de empresas extranjeras.
Para justificar el que empresas extranjeras entren más también a la exploración y producción, dicen que, a diferencia de empresas extranjeras, Pemex no tiene la tecnología requerida para extraer petróleo de yacimientos que están a más de mil 500 metros de profundidad, donde estaría la mayoría del crudo de México. Esta ya es la pura invención.
Hace un par de meses, en el artículo “La energía y las palabras”, demostramos cómo se usan categorías de reservas petroleras que organismos calificadores y de autoridad no aceptan, como son las reservas probables y las posibles, estas últimas con 10 por ciento de probabilidad de existir. Y luego agregan otra categoría, a la que ni siquiera se atreven a ponerle nombre, ni tampoco dicen si hay uno por ciento de probabilidad de que existan o cuánto. A falta de nombre, les llamaremos reservas inventadas. Y de estas reservas inventadas son las que la mayoría están en aguas profundas. Todo sea por entregar la actividad petrolera a algunas trasnacionales.
Para decirlo de otra manera, no existen perforaciones exploratorias que den un mínimo soporte a la existencia de esas reservas. Debería haber varias perforaciones exploratorias en lo que podría ser un yacimiento, para delimitarlo y poderlo cuantificar. Las reservas que sí existen están en las zonas tradicionales de trabajo o junto a ellas, y no hay justificación para que no sea la nación, como dice el artículo 27 constitucional, la que los tenga, explore y explote. Ese mismo artículo prohíbe incluso los contratos en esta materia, de modo que los que se han firmado también son anticonstitucionales.

viernes, diciembre 21, 2007

Petróleo. Asalto,"entradas por la puerta de atrás"

La Jornada

México SA

Carlos Fernández-Vega cfvmx@yahoo.com.mxcfv@prodigy.net.mx

Entradas por la puerta de atrás

Busca abrir paso al capital trasnacional a actividades constitucionalmente reservadas al Estado

A Felipe Calderón ya le gustó eso de entrar por la puerta de atrás, porque no sólo la utilizó para imponerse la banda tricolor, sino que por aquella ahora pretende “colar” al capital trasnacional en actividades constitucionalmente reservadas al Estado en materia petrolera. Nada nuevo, sin embargo, porque el michoacano se limita a seguir la muy productiva estrategia que sus ahora excelentes amigos priístas y del “cambio” aplicaron para el sector eléctrico.

Por la puerta de atrás, y de la mano de los coordinadores parlamentarios del PRI, Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa, y un grupo de ex secretarios de Energía (Francisco Labastida –presidente de la comisión de Energía en el Senado-, Fernando Elizondo Barragán, hoy senadores de la República, y Jesús Reyes Heroles González Garza, ahora al frente de Pemex), entre otros personajes visibles, pretende modificar una serie de leyes secundarias en materia energética para que por allí se cuele, sin necesidad de cambios constitucionales, el capital privado, nacional y extranjero, al jugoso negocio del oro negro (hasta ahora) mexicano.
Acción Nacional presume que ya “amarró” el acuerdo privatizador (de “apertura”, “asociación” o “alianza” le llaman) con el partido tricolor, el mismo que en su declaración de principios tajantemente dice no a cualquier participación privada en la industria petrolera; el coordinador de los senadores priístas, Manlio Fabio Beltrones, ya explicó que después de la “reforma” de seguridad y justicia (léase el Estado policíaco) vendría la energética, aunque sin tratarse, dijo, de “una privatización a ultranza; el presidente de la Comisión de energía del Senado, Francisco Labastida Ochoa, precisó que serán nueve las leyes secundarias a “replantear” y el inquilino de Los Pinos instruyó a sus huestes en San Lázaro y Xicoténcatl para que voten para redondear el asunto. Y todo sin cambios constitucionales, pero como bien recuerda el ex senador Manuel Bartlet, “las privatizaciones salinistas se hicieron afirmando que se respetaba la Constitución, violándola”.

Esa es una primera línea de acción, pero es de esperarse el paso definitivo dada la terquedad del michoacano que entró por la puerta de atrás. Y es que él mismo, durante su fugaz paso por la Secretaría de Energía en tiempos foxistas y como caliente precandidato presidencial panista, definió lo que a su muy trasnacional entender debe hacerse: “es necesario complementar la inversión pública con inversión privada, bajo diversas formas de participación, para lo cual es indispensable dar plena certeza jurídica a la inversión (privada). Es precisamente esta última la razón de nuestra insistencia en que la reforma al sector abarque también una reforma a la Carta Magna.
“La adecuación al texto de los artículos 27 y 28 constitucionales es la única manera de otorgar plena certidumbre jurídica y con ello dar viabilidad al sector eléctrico sin perder el control del mismo. En esta materia, lo que buscamos es que se establezca con toda claridad, en la Constitución, que los particulares podrán generar la energía eléctrica de manera complementaria a la que generan las empresas del Estado.
“A nadie le conviene una legislación que suponga riesgos. Debemos reformar para dotar de seguridad a la inversión existente, alentar la futura y al mismo tiempo dejar en claro en el mismo texto constitucional que el servicio público de energía eléctrica será prestado de forma exclusiva por el Estado a través de las empresas públicas. Ante la resolución de la Suprema Corte donde señala que la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica pudiera contener disposiciones contrarias a la Constitución, es indispensable una reforma que despeje cualquier duda sobre la legalidad y legitimidad de las inversiones privadas en el sector.
“Ninguna legislación secundaria podrá dar los espacios de garantía y claridad que una modificación al texto constitucional puede establecer en materia de certidumbre, confianza y seguridad a todos los actores. Lograr que la inversión pública y privada compartan la responsabilidad de invertir en el sector generación nos permitirá, además como gobierno federal, destinar recursos a otras áreas; vale la pena resaltar que las inversiones anuales que el sector eléctrico requiere representarían más de dos veces las erogaciones en el presupuesto para ciencia y tecnología, dos y media veces el programa de Oportunidades, tres veces o más de tres veces la atención a la población indígena...”
Lo anterior fue expuesto por Calderón el 17 de noviembre de 2003, durante su única comparecencia como secretario foxista de Energía en el Senado (sólo es cuestión de cambiar “sector eléctrico” por “sector petrolero”). Ya en Los Pinos intenta pasar el primer paquete por la puerta de atrás, pero es de esperar (si alguien no lo frena, porque hasta ahora es más importante la pelea por huesos y menudencias que la defensa de los intereses nacionales) que se lance por los cambios constitucionales, y en este contexto, en caso que llegue, la “izquierda moderna” (léase la pesetera…, perdón la pesetista) puede ser factor definitorio en la privatización del petróleo mexicano, o lo que es lo mismo oro por espejitos tecnológicos.
Ya tenemos la experiencia de la banca trasnacional, pero de plano no aprenden.

Las rebanadas del pastel:
“Para que vivamos mejor” (Calderón dixit) y “favorecer la economía familiar” (Sojo ídem), el siempre magnánimo régimen de la “continuidad” ha regalado a los mexicanos un aumento promedio de 35 por ciento en el primer año de estancia en Los Pinos… pero no al ingreso, sino a los precios de la canasta básica, una proporción nueve veces mayor al avance del oficial índice nacional de precios al consumidor y siete tantos por arriba del incremento que en el mismo periodo registraron los salarios manufactureros contractuales (La Jornada). Lamentablemente los precios se mantienen al alza, porque el año aún no concluye, en espera del gasolinazo de enero. Qué bueno que todo es “para que vivamos mejor”, como prometía el michoacano en campaña.

jueves, diciembre 20, 2007

Petróleo. Cocineros y pinches : platillo Pemex.

La Jornada

“Creemos que hay una gran oportunidad para la participación privada”: Rubén Camarillo

Alistan en el Senado permitir a la IP operar ductos y refinerías
La Comisión de Energía podría proponer cambios hasta en 10 leyes sobre petróleo y gas

Además de subir impuestos, Calderón puede conseguir la reforma energética, asevera analista
Adriana López Caraveo (Bloomberg)

Petróleos Mexicanos (Pemex), el mayor productor de crudo de Latinoamérica, podría perder su monopolio de 69 años de antigüedad sobre refinación y oleoductos porque el presidente mexicano Felipe Calderón está presionando a la empresa para que frene la caída en la producción y reservas de crudo.

Un plan que está estudiando la Comisión de Energía del Senado permitiría a compañías petroleras operar oleoductos, refinerías y distribuir productos petroleros en México, dijo el senador Rubén Camarillo, miembro del Partido Acción Nacional, de Calderón.

La exploración petrolera de Pemex se ve afectada por la falta de fondos. Aun cuando el crudo está cotizando en niveles cercanos a precios récord, el presupuesto de la compañía se ve reducido por las reparaciones a infraestructura en deterioro e impuestos que debe pagar, que ascienden a más de la mitad de sus ventas. Reducir el papel de Pemex en refinación, oleoductos y distribución de combustible liberaría efectivo en el tercer proveedor de crudo a Estados Unidos, dijo Camarillo.

Áreas rezagadas
“Creemos que hay una gran oportunidad para la participación de la iniciativa privada siempre y cuando se sujete al concepto de que Pemex no se privatice”, dijo Camarillo en una entrevista el 14 de diciembre en la ciudad de México. “Nosotros vemos ductos, transportación, distribución y almacenamiento, que son áreas que están rezagadas”.

Permitir que compañías privadas desempeñen un mayor papel en la industria petrolera, controlada por el Estado, es una de las principales metas del partido de Calderón. La secretaria de Energía, Georgina Kessel, dijo la semana pasada que la producción de crudo de México podía caer un tercio para 2016 a menos que los legisladores relajen las reglas de Petróleos Mexicanos.

La Comisión de Energía podría proponer cambios en hasta 10 leyes de petróleo y gas, como el nombramiento de miembros independientes a la junta directiva de Pemex, dijo Camarillo y otro miembro de la comisión, Arturo Núñez, del Partido de la Revolución Democrática de la oposición.

Las reservas comprobadas de petróleo en Pemex cubrirán nueve años de producción a los niveles actuales. La compañía no cuenta con la tecnología requerida para extraer petróleo de pozos marítimos localizados a más de mil 500 metros de profundidad, donde se encuentra la mayoría del crudo de México.

El plan de Calderón afronta la oposición del Partido de la Revolución Democrática, que dice que los impuestos cobrados a Pemex, que equivalen a 57 por ciento de las ventas, deben ser reducidos a fin de que la compañía pueda invertir en producción, refinación y otras áreas. Pemex genera cerca de 40 por ciento de los ingresos del gobierno.
“Hay quienes dicen que no hay para ductos, que no hay para refinerías”, dijo Núñez en una entrevista el 17 de diciembre. “Esto es falso. El problema es el gobierno federal”.

La oposición también podría expresarse en manifestaciones. Andrés Manuel López Obrador, miembro del partido de Núñez y ex candidato presidencial, ha prometido que habrá protestas si el gobierno intenta “privatizar” Pemex. El año pasado organizó dos meses de manifestaciones tras perder en las elecciones presidenciales frente a Calderón.
Alianzas

Camarillo dijo que la comisión no ha hablado de enmendar la Constitución, que prohíbe que cualquier compañía con excepción de Pemex posea yacimientos de petróleo y gas. Kessel y el director general de Pemex, Jesús Reyes Heroles, han dicho que la empresa necesita alianzas para poder explorar y producir a partir de sus depósitos en aguas profundas.

“Hay muchas compañías que operan en el Golfo de México que tienen tecnología con la que Pemex no cuenta”, dijo el lunes Reyes Heroles en una entrevista con Radio Fórmula de la ciudad de México.
Calderón convenció al Congreso para que aprobara otras reformas este año, como subir los impuestos y recortar el gasto en pensiones, con la ayuda del Partido Revolucionario Institucional de oposición. Quizá también logre que se apruebe el proyecto de ley sobre energía, porque la caída en la producción petrolera está obligando a los legisladores a actuar, dijo Roger Tissot, analista energético de la consultoría PFC Energy, de Washington.
Reservas, producción
“Todo el mundo puede ver los resultados en términos de la caída en la producción y las reservas”, dijo Tissot en una entrevista telefónica. “Ambas partes están llegando a un acuerdo de que es necesario hacer algo”.
El partido de Calderón ha descartado las ideas de privatizar Pemex y el Partido Revolucionario Institucional y otros grupos de oposición han aceptado que permitir más inversión privada en la industria petrolera no equivale a “vender la patria”, dijo Tissot.

Camarillo dijo que los miembros de la Comisión de Energía acordaron que “por ningún motivo vamos a poner en subasta el petróleo mexicano. El petróleo mexicano es exclusivo de los mexicanos, y de ninguna manera, bajo ningún concepto, va a haber la posibilidad de que este petróleo crudo y su usufructo vayan a empresas privadas nacionales o extranjeras. Que se olviden los que piensen que hay la más mínima posibilidad de privatizar Pemex. Pemex no se privatiza”.
El senador Francisco Labastida, presidente de la Comisión de Energía y miembro del Partido Revolucionario Institucional, se negó a ser entrevistado para este artículo.
La inversión privada y extranjera en la industria petrolera y de gas de México ha sido limitada y ha enfrentado acciones legales iniciadas por legisladores en los últimos años.
Desde 2003, Pemex ha contratado a compañías como Petróleo Brasileiro SA para buscar gas en la cuenca de Burgos a cambio de una comisión. A principios de este año, Pemex contrató a compañías privadas para que den mantenimiento a oleoductos y administren la perforación en el yacimiento petrolero de Ébano-Pánuco. Algunos gasoductos en México son propiedad de compañías privadas.
Versión en español: Giselle Rodríguez/ Bloomberg

miércoles, diciembre 19, 2007

Petróleo. "Evitar la privatización del sector bajo cualquier modalidad": Gobierno Legítimo.

PRESENTACIÓN DEL PROYECTO ALTERNATIVO PARA RESCATAR Y DESARROLLAR AL SECTOR ENERGÉTICO Y CONVERTIR A MÉXICO EN UNA POTENCIA ENERGÉTICA, A CARGO DE LOS SECRETARIOS DE PATRIMONIO NACIONAL, CLAUDIA SHEINBAUM; DE LA HACIENDA PÚBLICA, MARIO DI COSTANZO, Y PARA LA HONESTIDAD Y AUSTERIDAD REPUBLICANA, OCTAVIO ROMERO

Hoy hablamos de rescatar al sector energético porque desde 1983 los gobiernos neoliberales lo han debilitado, descapitalizándolo y tomando decisiones estratégicas contrarias a su desarrollo y creando un ambiente propicio para su privatización y entrega al extranjero.
Esto lo han hecho fomentando la creciente dependencia de gas del exterior, permitiendo que las reservas de crudo se reduzcan a niveles peligrosos como no lo permite ninguna empresa petrolera del mundo, negándole a Pemex los recursos para invertir en refinación y obligando a la reducción de producción en las plantas petroquímicas.
La estrategia de debilitamiento del sector energético y en particular de Pemex la han justificado los gobiernos, entre otros, con el argumento de que no hay recursos presupuestales suficientes para mantener el alto nivel de inversiones que este sector requiere. Esto es una falacia.
En primer lugar, porque los recursos para el gasto público destinado a otros fines han ido en constante aumento, sobre todo en el gasto burocrático. En segundo lugar, porque lo que se invierta en el sector energético siempre se paga sólo.
Por eso nuestro proyecto alternativo contiene dos acciones profundas y simultáneas, justificadas por la verdadera emergencia nacional que tenemos para evitar la privatización de este sector bajo cualquier modalidad.
Es imprescindible, en primer lugar, corregir la expansión del gasto corriente ocurrido en el sexenio pasado y mismo que continúa hoy, porque es en parte este gasto lo que impide liberar recursos para invertir en el petróleo.
El gasto total con el que comenzó el gobierno de Vicente Fox fue de 1,248 miles de millones de pesos (1.248 billones). Después de crecer cada año, llegó en 2006 a 2.255 billones y para 2008 se aprobó por el Congreso un gasto de 2.568 billones.
Dentro de este gasto, el corriente aumentó de 714 mil millones a 1.321 billones en 2006, es decir, casi se duplicó. Su aumento, de 607 mil millones, se financió con excedentes petroleros por 404 mil millones.
Estos excedentes surgen cuando se planea el presupuesto con un precio del petróleo y en la realidad resulta un precio mayor. Pero el gobierno ha derrochado el excedente en gasto corriente, en lugar de invertirlo. El gasto corriente aumentó en el sexenio pasado en 607 mil millones de pesos, mientras que la inversión física directa sólo aumentó en 19 mil millones. Por cada peso que aumentó la inversión, el gasto corriente aumentó 32 pesos.
Propuesta de reducción del gasto corriente
El rescate de nuestro petróleo, gas y electricidad merece cualquier sacrificio. Nuestra propuesta es una reducción del gasto corriente, para con ello realizar un aumento de la inversión, de tal manera que no proponemos una simple reducción con consecuencia negativas para la demanda, sino un mejor gasto.
El alto gasto corriente y el grave dispendio que el gobierno hace del mismo, manteniendo una alta burocracia excesivamente costosa y con grandes privilegios, nos permite asegurar que una fuerte reducción del gasto corriente es posible y deseable.
No por cuantiosa la propuesta de reducción es utópica. México ha realizado estas reducciones en muchas instancias en el pasado reciente. En los 80’s, el gasto se redujo en 2 puntos porcentuales del PIB; a principios de los 90’s también se lograron 2 puntos; y a mediados de los 90’s se tuvieron logros similares. Pero, a diferencia de la reducción de gasto que han hecho en el pasado los gobiernos neoliberales, basada en reducir el gasto de inversión y obra pública, nosotros proponemos reducir el gasto burocrático.
La regla que proponemos no toca los salarios de los empleados públicos, aunque sí los de la alta burocracia. Tampoco creemos necesario reducir los gastos sociales en educación y salud ni en programas de apoyo a sectores desprotegidos. Pero sí proponemos reducir el gasto en los costos operacionales.
Los gastos operacionales del sector público han registrado en el sexenio pasado el incremento más fuerte, de 261 mil millones de pesos en los seis años hasta 2006, para llegar a 487 mil millones. Este incremento ha sido a pesar de que el gobierno no ha hecho nada nuevo en materia de obra pública que justifique este aumento. Lo que sí ha ocurrido es el crecimiento de la burocracia, de las compras de materiales que hace, de la corrupción en las compras y de la duplicación de gastos.
Proponemos que este gasto operacional se ajuste a lo que debió haber sido su crecimiento desde 2001 si se hubiera ajustado a una mínima norma de eficiencia. Proponemos que su crecimiento a partir de 2001 debió haber seguido una tasa de la mitad del crecimiento de la economía, mediante un aumento sostenido de la productividad en el sector público.
Los ahorros que hoy tendríamos mediante la aplicación de esta regla serían en todo el sexenio de 487 mil millones de pesos menos de lo que gastamos. No hay justificación para argumentar pérdida de eficiencia en el sector público, ya que si estamos preparados a realizar inversiones públicas por un monto equivalente, habría dinero suficiente para mayor capacidad física y mantenimiento de la misma, incluyendo equipos y materiales. Lo que no habría sería dinero para dispendio, sobreprecios a contratistas o compras innecesarias.
Podemos comprobar que el valor de ahorros que se hubiera obtenido sería superior a la suma de excedentes petroleros por encima del presupuesto por 404 mil millones. Agregamos que aun en el año 2000, el aparato burocrático era demasiado obeso y que era factible desde entonces efectuar una reducción aún mayor que la que resultaría de la regla que proponemos.
Bajo esta norma, el gasto de 2006 sería 193 mil millones de pesos menos a lo que fue. Como porcentaje del PIB, la reducción sería en promedio de 1.1% en los últimos seis años y de 2%, en 2006. Hay que recordar que en ese año solamente, el excedente presupuestal petrolero fue de 105 mil millones de pesos. Debemos recordar que el gasto corriente durante los pasados 6 años aumentó de 13% al 14.4% del PIB, de tal manera que el ajuste que proponemos no es irrealizable.
En julio pasado propusimos generar ahorros por 20 mil millones de pesos para que no fuera necesario aumentar los impuestos a la gasolina y con ello los precios y la inflación. Entre otros planteábamos ahorros por reducción de salarios de la alta burocracia, así como privilegios.
Hoy la tarea es más urgente aún. Frente al argumento del gobierno espurio de que no hay recursos para invertir en petróleo, gas y refinación y que por lo tanto no queda otra más que vender Pemex, nuestro proyecto es convocar a un esfuerzo de todos para obtener ahorros que a la larga nos van a resultar en un sector energético mucho más fuerte y capaz de impulsar el desarrollo de México, sin perder soberanía.
¿Qué debemos corregir en el sector energético?
Como ya lo mencionamos, los gobiernos neoliberales han aplicado en materia de energía, políticas contrarias al interés nacional. En lugar de mantenerla como fuente de empleo, competitividad y valor agregado nacional, la han descapitalizado, desintegrado de la industria nacional y relegado al papel de fuente de ingreso fiscal. Para ello han encarecido sus productos y creado un enorme obstáculo a la competitividad nacional.
A mediados de los 80’s, todavía éramos autosuficientes en gas y gasolina, y la balanza comercial en petroquímicos era ligeramente superavitaria. Hoy dependemos del exterior para:
el 40% de la gasolina,el 25% del gas y cuantiosas importaciones de petroquímicos que, junto con el gas y los refinados, arrojan importaciones por 20 mil millones de dólares. Estamos exportando materias primas e importando productos derivados, pero con un valor agregado mucho mayor.
Hasta principios de los 80’s la integración del sector energético era alta y creciente, con gran desarrollo tecnológico y con efectos multiplicadores y sinergias con los proveedores de la industria, desde fabricantes de maquinaria hasta grandes firmas de ingeniería de diseño y construcción de plantas. Hoy los proveedores nacionales han sido desplazados por extranjeros al trasladar los pedidos a firmas del exterior, con la consecuente pérdida de empleos, divisas y desarrollo tecnológico. Los ingenieros graduados que antes iban a la industria, hoy van a trabajar para las empresas extranjeras que Pemex subcontrata, pero en mucho menor número.
Las empresas que forman parte de Pemex y del sector eléctrico han sido descapitalizadas. Sus fuertes ingresos han sido capturados por el gobierno para financiar el desmedido crecimiento del gasto corriente. Esto ha ocurrido a pesar de que los precios que el gobierno impone para la electricidad, el gas y los refinados son muy altos si se comparan con los precios internacionales. Una consecuencia es que el gobierno ha sacado de la competencia a muchas industrias privadas. Los consumidores también sufren las consecuencias de estas políticas, por los altos precios que tienen que pagar.
Requerimos de este esfuerzo presupuestal para comenzar a corregir los grandes errores que nos llevan a la situación actual. Estos errores son
1. Una política de precios equivocada, que maximiza el ingreso fiscal en el corto plazo, sin mirar hacia el mediano y largo plazo y a costa de las posibilidades de la industria y de toda la economía. A diferencia de las grandes empresas petroleras internacionales, que están integradas y maximizan el valor agregado total, Pemex aplicó precios internos entre sus diferentes subsidiarias que lo han llevado a cerrar y descapitalizar áreas completas de negocios que deberían no sólo ser rentables, sino ser un eslabón de apoyo para la industria usuaria de sus productos. A su vez, los precios que cobra a sus clientes nacionales han hecho que el sector privado también haya cerrado y dejado de invertir en muchas áreas de la petroquímica.
2. La falta de inversión en todas las áreas de Pemex, desde la exploración de crudo y producción de gas, refinación y petroquímica. Ello nos ha convertido en deficitario en gasolina y gas, y contribuido a los altos precios del gas, pues lo tenemos que importar de Estados Unidos, un país de precios altos y que a su vez es deficitario en gas. Estos precios altos tienen graves consecuencias para la industria nacional y para sus planes de expansión en México.
3. La intención de los gobiernos neoliberales de privatizar la industria. La falta de inversión ha sido ante todo una decisión de los gobiernos desde Miguel de la Madrid hasta Calderón, y servido como pretexto para argumentar que no producimos lo suficiente porque no hay inversión y que debemos cambiar la Constitución para permitir que el sector privado haga esas inversiones. Esa política no se maneja de frente a la nación, sino se aplica en un bajo perfil, pero cada día que pasa hace más débil a Pemex y a la CFE. Aparte de que no estamos de acuerdo con la desnacionalización de la industria, es imperdonable manejar la falacia de que los mexicanos no somos capaces de administrar bien la industria o de aplicar la tecnología que se requiere.
4. La decisión de usar gas natural en todo el crecimiento de la industria eléctrica, ha sido a todas luces una política equivocada. Aunado a la falta de inversión para producir gas, ha resultado en precios muy altos. El gobierno desechó las alternativas de usar derivados del petróleo crudo, abundantes y de difícil comercialización externa, en lugar de gas. De hacerlo se reducirían tanto el costo de la electricidad como el de las importaciones de gas. Existe la

tecnología para usar estos combustibles sin causar deterioro del medio ambiente. La decisión de seguir usando gas natural es totalmente irracional.
5. El cambio en las modalidades de licitación en Pemex y la industria eléctrica han favorecido a los proveedores extranjeros, desplazando a los nacionales. En particular, el financiamiento vía Pidiregas, encarece el costo directo y el costo financiero de las inversiones y discrimina contra los proveedores nacionales, especialmente los medianos y pequeños. La consecuencia de esto es una creciente dependencia de proveedores extranjeros, con la consiguiente pérdida de empleos y divisas.
6. La división de Pemex en empresas subsidiarias independientes aumentó el costo y la complejidad administrativa de la empresa. Más importante aun, la política de precios de transferencia entre estas empresas ha sido tan irracional para ser empresas de un mismo dueño, que ha acabado con procesos industriales completos sobre los cuales ya teníamos un gran avance como productores.
7. La falta de control del gasto corriente del gobierno ha reducido aún más las posibilidades de invertir en el sector energético. Así, hoy tenemos la paradoja de que con precios históricamente altos del crudo, cuando la empresa de mayores utilidades en el mundo es una empresa petrolera, el sector petrolero mexicano está descapitalizado.
Estamos en uno de los momentos más críticos para la nación y convocamos a todos a reflexionar y a unirnos en el proyecto alternativo de rescate del sector energético. El Gobierno espurio ha emprendido una campaña para desacreditar a Pemex, diciendo que pierde dinero y que no tiene ni recursos ni tecnología para las tareas que enfrenta. Esto es un mito. Pemex genera un gran superávit antes de impuestos, de casi 60 mil millones de dólares o más del 6% del PIB. Es la empresa más rentable del país y la segunda petrolera con mayor flujo de efectivo del mundo. Los impuestos que pagó el año pasado fueron 60 mil millones de dólares, equivalentes a 38% del ingreso del gobierno federal y a más de 3 veces lo todas las empresas privadas del país pagaron de impuesto sobre la renta. Si Pemex no invierte lo suficiente es porque el gobierno se lo confisca todo. En cuanto a la tecnología, ésta se puede contratar, pero más importante aun es que tenemos los técnicos mexicanos para asimilarla y desarrollarla, tal como se hizo desde 1938 hasta principios de los 80’s. Contra todos los pronósticos de las compañías extranjeras, Pemex en 1938 salió adelante en sus operaciones, como lo va a lograr hoy, con 70 años de experiencia de nuestros técnicos. Sólo los tecnócratas acomplejados y vende patrias pueden argumentar que hoy Pemex no puede y que el sector privado es el único salvador.
¿Cómo podemos lograr el fortalecimiento energético?
1. Ante todo es imperativo cobrar conciencia de nuestra identidad nacional. No queremos ir hacia atrás en la historia de México y vender patrimonio nacional al extranjero, como lo hizo Santa Anna, a quien las ventas de territorio ni siquiera le alcanzaron para financiar su gasto corriente. Así tampoco la venta de Pemex sería suficiente para cubrir el gasto corriente del gobierno.


2. Reducir el tamaño y el gasto corriente del gobierno para obtener ahorros por 200 mil millones de pesos en una primera instancia y a partir de ahí someter el gasto corriente operacional a una regla de eficiencia que limite su crecimiento a la mitad de lo que crece la economía. Esto es condición

indispensable para redimensionar el tamaño del gobierno a nuestras circunstancias y necesidades y ganar credibilidad frente a la sociedad.

3. Rescatar el carácter integral de Pemex, fusionando sus diferentes empresas subsidiarias en una sola, eliminando gastos redundantes y permitiendo una toma de decisiones racional sobre su gestión y sus precios internos de transferencia. Al reducir el gasto del gobierno, se facilitaría el financiamiento para un ambicioso programa de inversión en todo el sector energético, pero en particular en Pemex.
4. Determinar que todo el excedente presupuestal petrolero, por encima del precio promedio de 2006 sea invertido en el desarrollo del sector energético. Para tener una idea del potencial de esta medida, si se mantuviera el precio de hoy por un año, este excedente sería de 200 mil millones de pesos. La inversión requerida para satisfacer las necesidades de gasolina del país es de 110 mil millones. Con 6 meses que se mantengan los precios actuales se financiaría esta capacidad de refinación, reduciendo las importaciones de gasolina en el rango de 80 mil millones de pesos por año.
5. Utilizar el aumento de recursos para Pemex para invertir en proyectos urgentes, en particular en la producción de crudo en campos existentes, principalmente en las aguas someras, en donde tenemos cuando menos 15 mil millones de barriles de reservas. Un esfuerzo sostenido en estos campos a lo largo de varios años nos daría eventualmente la capacidad tecnológica y la capacidad de negociación en la compra de la tecnología que fuera necesario adquirir afuera, para emprender exploración y producción en mayores profundidades. A la exploración de nuevos campos podemos dedicar 30 mil millones de pesos y al desarrollo de yacimientos de gas natural 20 mil millones. La construcción de refinerías, la modernización y ampliación de plantas petroquímicas y el aumento de gastos de mantenimiento por 20 mil millones de pesos caben perfectamente en un presupuesto de 20 mil millones de dólares que sería el recorte de gasto que proponemos, sin considerar los excedentes petroleros en los precios que actualmente tiene. La diferencia entre un sector energético realmente fuerte, que reconstituya importantes cadenas industriales de oferta y demanda y nos haga competitivos en precios son estas acciones que demandan de una gran disciplina presupuestal y de un gobierno nacionalista y preocupado por engrandecer a México.
6. Cambiar la forma de contratación de los proyectos de inversión de Pemex. El Instituto Mexicano del Petróleo debe volver a jugar un papel importante en el desarrollo de tecnología y proveedores nacionales. Los proyectos se deben asignar a los proveedores de menor costo y mayor calidad y no sólo a los que pueden obtener financiamiento. Se debe prescindir de los Pidiregas para nuevos proyectos y en su lugar utilizar deuda directa, cuando sea necesaria.
7. Comenzar a prepagar el saldo de Pidiregas. El prepago se puede financiar con emisión de bonos en los mercados internacionales, lo que generaría ahorros de cuando menos mil millones de dólares anuales tan sólo en intereses. O bien el prepago lo lograríamos, si el gobierno adquiere reservas internacionales del Banco de México, logrando un ahorro en el costo de servicio de la deuda hasta de 2 mil millones de dólares en la contabilidad consolidada del sector público. La señal que debemos dar al mundo es que la deuda de Pemex es una deuda de la Nación.

8. Cambiar el sistema de precios de Pemex y de la CFE. Al interior del sector energético debemos aprovechar al máximo la infraestructura existente. Hacia fuera del sector, debemos reducir los precios con una referencia nacional que refleje los costos sin quitarle competitividad a la industria. Esto daría certidumbre a la industria nacional, lo que tendría enormes beneficios.
9. Impulsar el desarrollo científico y tecnológico en materia energética, tanto de hidrocarburos como de fuentes renovables.
De aplicarse esta propuesta, tendríamos ahorros directos de divisas para el sector público de 10 mil millones de dólares por año, en menores importaciones de gasolina y gas. Estos se complementarían con ahorros importantes en las importaciones del sector privado.
Como muchos de esos productos se fabricarían en México, se crearían empleos directos y, adicionalmente, los proveedores del sector energético tendrían un ciclo de alta inversión y crecimiento. La industria nacional sería más competitiva por los menores precios de los insumos energéticos y el crecimiento económico sería mayor.
Estas medidas son necesarias y urgentes. El no actuar inmediatamente nos puede poner en situaciones muy difíciles y comprometer la soberanía nacional, como varias veces ocurrió en los dos siglos pasados.
Más aun, si no se fortalece al sector energético, corremos el riesgo adicional de un grave deterioro en las condiciones de oferta de energéticos internacionales y graves tensiones geopolíticas entre consumidores y productores, como las que hoy vemos en el medio oriente. Ningún mexicano patriota quiere poner a México en una grave situación de dependencia del extranjero en materia energética.
Calderón nos va a salir con que la única salida para una crisis energética y financiera es vender nuestra industria energética. Esto sería irresponsable y antipatriota, pero no obstante, sería consistente con lo que han hecho los últimos gobiernos desde principios de los 80’s. Es responsabilidad de todos los mexicanos impulsar políticas que potencien al sector energético y oponerse, a toda costa, a la privatización del sector, último gran patrimonio de los mexicanos.

"La privatización de Pemex, cercana: medios financieros"

La Jornada

A Calderón le gustaría involucrar a compañías privadas con Pemex, plantea EIU

Banamex considera que los tiempos están “a punto” para una reforma energética

Medios financieros ven inminente un cambio constitucional que abra la petrolera a la IP

Roberto González Amador


Banamex, filial en México del consorcio financiero estadunidense Citigroup, consideró ayer que “los tiempos parecen estar a punto” para una reforma energética en la que dos de los tres partidos dominantes en el Congreso, Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI) ven con buenos ojos permitir el capital privado en el sector, mientras que la otra formación relevante, el Partido de la Revolución Democrática (PRD), se opone.
“No es un secreto que (al presidente Felipe) Calderón le gustaría dar a Petróleos Mexicanos mayor flexibilidad para involucrar a compañías privadas, pero necesita el apoyo del PRI para hacerlo”, planteó por su parte Economist Intelligence Unit, en un reporte sobre México.
Esta semana, La Jornada reveló la existencia de un acuerdo entre Petróleos Mexicanos (Pemex) y la anglo-holandesa Royal Dutch Shell para actividades de exploración en el campo petrolero de Chicontepec, Veracruz, como parte de una estrategia de mayor alcance para tomar posiciones en el país ante una posible eliminación de la prohibición que establece la Constitución para que capital extranjero participe en la industria energética nacional.
El lunes, Pemex dijo que existe el convenio, como los tiene con otras cuatro trasnacionales, pero aseguró que sólo tienen alcance tecnológico y científico y no fines comerciales.
Pero la posibilidad de que se realice una reforma que elimine la barrera que establece el artículo 27 de la Constitución al capital privado en Pemex es manejada en medios financieros como algo que va a ocurrir y que sólo falta conocer detalles o su alcance.
En un reporte divulgado este martes por su área de análisis económico, Banamex mencionó que la “aprobación de la reforma energética” es probable antes del término del primer periodo de sesiones del Congreso en 2008, esto es, antes del 30 de abril próximo.
“Los tiempos parecen estar a punto para un acuerdo sobre la reforma energética. Hemos conversado con varios legisladores en días recientes y nuestra impresión es que el Congreso y el presidente Calderón están listos para avanzar en las discusiones, y eventual acuerdo sobre una reforma energética”, indicó el reporte elaborado por sus especialistas Sergio Kurczyn y Sergio Luna.
“Percibimos que los legisladores están conscientes que dejar las cosas como están ya no es una opción”, añadió el reporte. “Pensamos que los legisladores darán prioridad a lo que es políticamente factible”.
Según Banamex, la postura de los partidos políticos grandes parece definida: el desacuerdo clave tiene que ver con el tema de si una reforma constitucional es necesaria o no. Un tema nodal, abunda, es cómo incrementar las tasas de inversión de Pemex. Mientras el PAN y el PRI están a favor de permitir capital privado, el PRD se opone.
Los expertos de Banamex plantean que una forma de incorporar inversión a Pemex podría ser a través de permitir a compañías privadas operar como contratistas o competidores en actividades que a la fecha efectúa de forma exclusiva la paraestatal, como refinación, petroquímica, transporte y almacenamiento.
Otra opción, consideran los especialistas, es mediante contratos de asociación entre Pemex y otras compañías petroleras en áreas bien delimitadas, tales como la exploración y producción en aguas profundas.
El tema, plantea Banamex, es si es suficiente modificar la ley reglamentaria de 1958, que establece que Pemex “en ningún caso concederá (…) porcentajes en los productos, ni participación en los resultados de las explotaciones”, o bien es necesaria una modificación del artículo 27 constitucional.
“El PAN apoya la reforma constitucional, pues ello asegura que las modificaciones no pueden ser impugnadas legalmente, pero la postura del PRI es que un cambio en la ley reglamentaria basta para ofrecer certidumbre a socios potenciales, amén de que una reforma constitucional no es políticamente factible. Así, el escenario probable es una modificación de la ley reglamentaria, pero en esta etapa no podemos descartar la posibilidad de una reforma constitucional”, concluye Banamex.
En un reporte titulado “Calderón tiene enfrente un año desafiante”, Economist Intelligence Unit (EIU), uno de los medios más influyentes en la comunidad financiera internacional, menciona que en el primer año de esta administración el crecimiento económico ha sido decepcionante y las barreras para impulsar ese crecimiento, como la existencia de monopolios en algunos segmentos, se mantienen firmes.
Los próximos 12 meses podrían ser más difíciles porque Calderón tendrá que tomar seguramente la decisión “sobre la delicada cuestión de la reforma energética”, señaló el reporte de EIU, recibido por La Jornada como parte de un convenio especial entre ambas empresas editoriales.
EIU, empresa del mismo grupo que edita la revista The Economist, recordó que la dependencia del gobierno federal hacia los ingresos petroleros ha aumentado en los últimos años, hasta representar la venta de crudo 40 por ciento de los recursos con que cuenta cada año el Estado. A la vez, la producción de petróleo ha disminuido por falta de inversión de Pemex.
“No es un secreto que a Calderón le gustaría dar a Pemex mayor flexibilidad” para permitir la inversión privada, añadió. EIU dice que para lograr una reforma de ese tipo necesitaría del apoyo del PRI, dado que el PRD ha hecho explícito un rechazo a cualquier iniciativa de apertura al capital privado en la industria petrolera.
Pero el PRI ha logrado una serie de victorias electorales este año que han aumentado su confianza en subir sus demandas a cambio de la cooperación en la reforma estructural, mencionó EIU.

martes, diciembre 18, 2007

Petròleo. "Privatizadores al acecho"

La Jornada

Editorial

Pemex: privatizadores al acecho

En información publicada ayer en estas páginas se da cuenta de un convenio de carácter confidencial, llamado Proyecto Margarita, entre Petróleos Mexicanos (Pemex) y la empresa anglo-holandesa Royal Dutch Shell, para realizar actividades de exploración en el campo petrolero de Chicontepec y posicionar a la trasnacional en el país ante una eventual eliminación de las restricciones constitucionales a la inversión privada en el sector energético. La reacción de la paraestatal al respecto ha sido errática, pues primero negó la existencia de un proyecto con ese nombre, si bien admitió que se tiene un acuerdo con Shell, firmado en septiembre de 2007, cuyo objetivo es estudiar en conjunto opciones para mejorar la producción de hidrocarburos. Finalmente, en un documento enviado ayer a este diario, Pemex sostiene que lo único que se mantiene con Shell es un “convenio general de colaboración”, firmado en 2004 para llevar a cabo “estudios de carácter no comercial en materia de investigación científica y tecnológica”, que a su vez forma parte de una serie de alianzas suscritas con otras compañías petroleras, como la noruega Statoil y la brasileña Petrobrás.
La respuesta de los directivos de Pemex, sin embargo –en parte por su falta de claridad en torno a las fechas y la naturaleza de los convenios firmados con empresas internacionales– no deja de generar suspicacias sobre si lo que se está configurando es un proyecto privatizador, que tendría, por ahora, tres vertientes: una campañía que busca presentar a la paraestatal como una empresa depreciada, económicamente inviable y prácticamente en quiebra, y que obedece al afán del grupo en el poder de justificar la venta de ésta a un precio muy por debajo de su valor; la actitud demagógica del gobierno federal, expresada en la negativa sistemática de las intenciones de privatizar la paraestatal, y la suscripción de acuerdos, aparentemente inconfesables, con empresas internacionales, como el que existe con Shell
Sostener que los convenios que se han suscrito con empresas privadas son de carácter “no comercial” y se limitan a la investigación científica y tecnológica es, por decir lo menos, ingenuo: en la industria petrolera lo que vale es, precisamente, la posesión de tecnología que permita la exploración y la explotación de yacimientos de hidrocarburos, pues de poco o nada sirven las reservas de crudo si no puede accederse a ellas. Además, hasta donde se sabe, compañías como Shell no son organismos consagrados a la investigación científica, y en ese sentido habría que preguntarse qué interés podría tener una empresa trasnacional en dicha colaboración si, como se afirma, no espera recibir ganancias económicas a cambio.
Por lo demás, cabe recordar que el problema de Pemex no es precisamente el riesgo inminente de una bancarrota –que sin duda implicaría el desmoronamiento de la economía nacional–, sino el persistente saqueo de que ha sido objeto, tanto por la confiscación fiscal de la mayor parte de sus ingresos como por la vasta e inveterada corrupción que impera en la administración de la paraestatal.
Ante lo que parece una nueva embestida de los intereses privatizadores contra Pemex, hay que insistir en la necesidad de colocarla en autonomía administrativa, a fin de que pueda disponer de sus ingresos e invertirlos en rubros fundamentales como la exploración, el desarrollo de nuevas tecnologías y la refinación. También es imprescindible que se combata la corrupción que flagela la administración pública –y que propicia la fuga de gran cantidad de dinero–, así como que se aplique, efectivamente, el cobro de impuestos a las grandes empresas y fortunas, para que el Estado cuente con recursos suficientes que le permitan su funcionamiento, sin asfixiar fiscalmente a la paraestatal ni tener que privatizarla parcial o totalmente.
Por último, la sociedad debe estar alerta y evitar cualquier intento del capital privado –de Shell o de cualquier otra compañía– de incidir en la vida de Pemex, toda vez que esas intenciones no obedecen a necesidades reales, sino al pago de facturas que aparentemente se firmaron para asegurar el control de la paraestatal a los aliados –nacionales e internacionales— del grupo en el poder.

lunes, diciembre 17, 2007

Petróleo. Pemex- Shell y sus contratos "confidenciales".

Suscribió con Pemex acuerdo confidencial, revelan documentos entregados a La Jornada

La trasnacional Shell explorará el campo petrolero de Chicontepec
El Proyecto Margarita, parte de una estrategia mayor, en espera de reforma constitucional

La paraestatal niega la existencia de ese plan, pero admite que en septiembre firmó un contrato
Israel Rodríguez J.



Una división de la multinacional anglo-holandesa Royal Dutch Shell logró un convenio con Petróleos Mexicanos (Pemex) para realizar actividades de exploración en el campo petrolero de Chicontepec, como parte de una estrategia de mayor alcance para tomar posiciones en el país ante una posible eliminación de la prohibición que establece la Constitución para que capital extranjero participe en la industria energética nacional.
Información entregada a La Jornada reveló la existencia del Proyecto Margarita, acuerdo entre ambas partes de carácter confidencial, llamado así por la propia trasnacional. Para proporcionar recursos a este proyecto, Shell Internacional Exploración y Producción formó un grupo de trabajo, que tiene su base en unas oficinas en Houston, Texas.
Pemex rechazó que exista el Proyecto Margarita, aunque confirmó a este diario que hay un acuerdo entre la petrolera mexicana y Shell, con varias cláusulas de carácter confidencial. La paraestatal mencionó que el único acuerdo que tiene con Shell fue firmado en septiembre de 2007, cuando ya había empezado la actual administración federal, con vigencia de seis meses y que tiene entre sus objetivos estudiar en conjunto opciones para mejorar la producción de hidrocarburos y más específicamente pretende caracterizar yacimientos, lograr incrementos en el factor de recuperación y aumentar la productividad en pozos.
La Jornada solicitó a la casa matriz de Shell, en La Haya, Holanda, información acerca del Proyecto Margarita.
La trasnacional no contestó a las preguntas de este diario, las cuales remitió a su oficina en la ciudad de México, la cual respondió que el convenio que existe con Pemex fue firmado en julio de 2004, fecha diferente a la informada por la oficina de comunicación de la paraestatal.

Regreso a México
La información sobre las actividades de la trasnacional, proporcionada por ingenieros de Pemex que han tenido acceso a los documentos confidenciales, señala: “Shell Internacional Exploración y Producción (SIEP) está tratando de reingresar en México. Pemex, la compañía petrolera nacional, está esperando que la Constitución mexicana sea cambiada en un futuro próximo para permitir la participación extranjera en los negocios petroleros de México.
“En preparación para ese evento, Pemex ha acordado con SIEP proporcionarle información sobre su campo Chicontepec, para que SIEP pueda desarrollar y proponer un plan de re-desarrollo si le fuera adjudicada alguna posición, aun desconocida, para realizar actividades de explotación en el campo petrolero Chicontepec. Este trabajo ha sido denominado Proyecto Margarita y es confidencial”.
Desde la posición de Shell, este proyecto consiste en tratar de poner “un pie en la puerta” para regresar a México, y el plan de redesarrollo es para demostrar cómo la trasnacional podría ser socio elegido apalancando la experiencia de su grupo. Para proporcionar recursos a este proyecto, se ha formado un grupo interdisciplinario, que tiene su base en las oficinas de Woodcreek de Shell en Houston, según la información entregada a este diario.
Los informes precisan que los ejecutivos de Shell Kara Floyd, Le Cong Le, Peter Stoffels, Jaap Veldkamp, Hon Chung Lau y John Pierce son ya parte del personal técnico que está involucrado en el Proyecto Margarita, que tiene por objetivo el regreso de Shell a México para realizar actividades de exploración y explotación en Chicontepec.
Para confirmar la veracidad de los informes y documentos, La Jornada envío el 24 de noviembre de 2007 un cuestionario a la matriz de Shell Internacional en La Haya, Holanda, el cual posteriormente fue remitido a su filial en México.
Shell México confirmó el 6 de diciembre que los funcionarios citados sí trabajan en la compañía, pero no quiso especificar sus funciones. El cuestionario preguntaba sobre el interés de Shell Internacional Exploración y Producción de trabajar aquí.
La respuesta obtenida el 6 de diciembre fue: “Sí, Shell tiene interés de trabajar en México, siempre y cuando dicha colaboración se lleve a cabo dentro del marco legal” del país.
Las observaciones generales de Shell, contenidas en los informes confidenciales proporcionados a La Jornada, reconocen que los temas políticos a discusión se deben a la sensibilidad mexicana sobre la propiedad de sus recursos de hidrocarburos. “Por esto a la retroalimentación a Pemex (presentación y documentación) tendrá que referírsele como opciones y opción preferible” para ser implementados por la paraestatal, “en vez de planes más concretos, por ejemplo, para una adquisición. La venta sutil es muy importante”.
La empresa petrolera anglo- holandesa, en respuesta a este diario, informó que suscribió un convenio general de colaboración firmado entre Shell Exploration Company (West) B.V. (“Shell”) y Pemex Exploración y Producción (“PEP”) en julio de 2004.
En el contexto de ese convenio, Shell y PEP “intercambian experiencias, conocimientos y mejores prácticas que permitan a ambas analizar la factibilidad de aplicar tecnologías especializadas en áreas como caracterización de yacimientos, incrementos en el factor de recuperación de petróleo y en la productividad de pozos bajo el Documento de estudio conjunto de carácter no comercial, en materia de investigación científica y tecnológica”.
Más adelante, Shell México ya no respondió a las demás interrogantes formuladas con base a la documentación entregada a La Jornada.
Posteriormente se consultó al respecto a Pemex, y el 14 de diciembre de 2007 la empresa paraestatal rechazó que haya un proyecto confidencial denominado Margarita, como los describen los informes entregados a este diario, pero ratificó que existe un convenio de colaboración suscrito entre PEP y Shell, que contiene algunas cláusulas confidenciales. Proporcionó una versión pública del documento.
El alcance técnico del acuerdo entre PEP y Shell consiste en que estudiarán conjuntamente opciones para mejorar la producción de hidrocarburos.
Se identificaron tres temas principales: caracterización de yacimientos, incrementos en el factor de recuperación y aumento en la productividad de pozos. Dentro de cada tema de estudio se analizarán las opciones haciendo uso de tecnologías de punta disponibles y de experiencias operativas.
El periodo de estudio será de seis meses a partir de septiembre de 2007 y se celebrarán cuatro sesiones plenarias:
Entre septiembre y octubre serán de revisión tecnológica.
En octubre, revisión de modelos, verificación de incertidumbres y plan de atención. Se realizará el primer taller de desarrollo sustentable, contenido local y desempeño social.
En diciembre se hará la revisión del modelo y los resultados, así como el segundo taller de desarrollo sustentable e impacto ambiental.
Para febrero de 2008 se programó la presentación de resultados, indica la información oficial de Pemex.
Actualmente PEP tiene entre sus principales proyectos de inversión 2007-2012 el área de Chicontepec, donde se pretende perforar 5 mil 421 pozos de desarrollo, con una inversión de entre 10 mil 500 y 14 mil 500 millones de dólares.

domingo, diciembre 16, 2007

"¡ Hazaña Geoenergética !".


La Jornada

Bajo la Lupa
Alfredo Jalife-Rahme

Rusia: hacia la Gazpromcracia

Tenía que ser: el zar geoenergético global Vlamidir Putin, apuntalado por su aplastante triunfo electoral en la Duma, ungió a Dmitri Anatolyevich Medvedev (abogado de San Petersburgo, viceprimerministro y más que nada diseñador de la exitosa política gasera de Gazprom), como su sucesor.
Dicho sea con humildad de rigor, ya habíamos previsto que el abogado Medvedev sería el probable delfín del zar geoenergético (“El rublo ruso da inicio a la competencia con el dólar”; Bajo la Lupa, 5/07/06), quien fungirá como primer ministro a partir de la primavera de 2008, cuando se celebren las elecciones presidenciales, cuyo resultado es más que conocido debido a la apabullante aprobación del zar Putin.

La suerte popular de Baby Bush es inversamente proporcional a la de su contrincante global, Putin: el primero se hunde en el abismo de la reprobación ignominiosa, mientras el segundo destaca con más de 85 por ciento de aceptación, lo cual refleja en última instancia el destino de las dos grandes potencias en los recientes siete años, cuando Rusia resucitó de los cementerios neoliberales y Estados Unidos feneció militarmente en la antigua Mesopotamia.
No se trata de tropicales caprichos foxianos, sino de una elaborada geoestrategia de la potencia nuclear rusa (primer productor de gas mundial) que mueve estupendamente sus hidrocarburos en el tablero del ajedrez mundial. El genio geopolítico de Putin entendió perfectamente los tiempos y los alcances del control de los recursos de los hidrocarburos; todo lo contrario de los mediocres talibanes neoliberales “mexicanos”, quienes no alcanzan a vislumbrar el horizonte geoenergético y han sucumbido en una disfuncional vulgaridad fiscalista que solamente sirve para nutrir parasitariamente a una corte cleptocrática y a una cohorte de piratas, que solamente buscan enriquecerse en detrimento del bien común poniendo en riesgo la integridad, la seguridad y la viabilidad de la nación.
Este comentario sobre los fiscalistas talibanes neoliberales “mexicanos” (en realidad se trata de piratas entreguistas apátridas) no es ocioso, porque emulan la conducta de los mafiosos “oligarcas” rusos durante la fracasada privatización energética que estuvo a punto de desaparecer a la antigua URSS de la faz de la Tierra en la fase aciaga del cándido Boris Nikolayevich Yeltsin.
En contraste a los multimedia de Israel (donde reside más de un millón de personas de origen ruso) que se han visto muy precavidos, la mendaz prensa anglosajona ha despotricado contra el “simulacro” electoral del aplastante triunfo del partido Rusia Unida, de Putin, cuando en México cerraron los ojos en forma hipócrita a la imposición de un tecnócrata de quinta, el cordobista Zedillo, quien llegó al poder gracias al asesinato de Luis Donaldo Colosio: tales son las dos pesas y mil medidas de Washington y Londres sobre los asuntos “democráticos” cuando brotan sus intereses geoenergéticos.
Con el apátrida fiscalista Zedillo a las trasnacionales anglosajonas se les facilitaba la entrega del petróleo mexicano, mientras que con el tecnócrata abogado, por cierto muy talentoso y exitoso, Medvedev, se les obstaculiza la captura de los energéticos rusos. Así que no es lo mismo ser un tecnócrata bendito que uno maldito cuando se trata de quién entrega los energéticos a las trasnacionales anglosajonas.
Putin lanza una señal combinada: por un lado, entroniza como su sucesor a Medvedev, un abogado de empresas privadas y estatales, además de ser un renombrado académico de la Universidad Estatal de San Petersburgo (la más occidental de las ciudades rusas) quien mantiene estupendas relaciones con Europa del Norte y favorece lo que pudiéramos llamar una “social democracia de libre mercado” con regulación estatal; y dos, al quedarse con el puesto de primer ministro, Putin marca la sana distancia con el eje Washington-Londres, al poner en tela de juicio varios tratados militares que ya había pisoteado el régimen torturador bushiano.
Con Medvedev se coquetea con Europa del norte (léase: los países germánicos y escandinavos) mediante la carta geoenergética que ha manejado magistralmente en los recientes siete años desde la dirección de Gazprom, mientras Putin se consagra, después de haber resucitado a su país de entre los muertos, a promover el incipiente orden multipolar y a establecer los nuevos equilibrios de poder global con Estados Unidos, China, la Unión Europea e India (en ese orden).
La mendaz prensa anglosajona, después de haber hecho el ridículo frente al aplastante triunfo parlamentario de Putin, ahora se va a la yugular del régimen para exhibirlo como un omnímodo poder autoritario unipersonal (The Financial Times, 14/12/07) y ve la paja en el ojo ajeno cuando tiene tremenda viga en sus propios globos oculares: la hilarante “democracia” estadunidense es de corte decimonónico, es decir, el voto popular no cuenta y la plutocracia mantiene el control del poder debido al voto indirecto del colegio electoral; después del infierno de Abu Ghraib, el régimen torturador bushiano haría mejor en no tocar el tema candente de los “derechos humanos”.
Más aún: en las fases anormales de los países, como fue el caso de Estados Unidos después de la Gran Depresión, uno de los mejores presidentes de toda su historia, Franklin D. Roosevelt (ya no se diga cuando se contrasta con el pueril Baby Bush), fue elegido tres veces consecutivas y pudo rescatar a su país del desastre financiero en que lo había sumido la parasitaria banca de J. P. Morgan, lo cual le prohijó la plataforma para su despegue como la superpotencia del siglo XX.
En términos de poder crudo y rudo, ¿dónde radica el problema de que en la fase exquisitamente delicada de Rusia, que requiere de intensos e intensivos cuidados después de su pulverización geopolítica en 1991, Putin consiga, lo cual no es el caso, tres mandatos sucesivos con el fin de consolidar sus logros apoteósicos de los pasados siete años? No son momentos de experimentos para complacer a sus rivales enemigos geopolíticos anglosajones.
Lo cierto es que Gazprom se convirtió en el pivote de la resurrección rusa y, a nuestro juicio, la unción de Medvedev consolida lo que pudiéramos denominar la Gazpromcracia. Se trata de un poder dual, el gas ruso, la primera reserva del planeta, bajo la cobertura nuclear del principal competidor geoestratégico militar de Estados Unidos. De ahí se deriva el genio geopolítico de Putin, quien no solamente restatizó la principal gasera rusa, después de habérsela arrebatado de las manos de sus peores enemigos (los piratas apátridas oligarcas), sino que la transformó en una de las principales empresas globales, hoy la tercera a escala planetaria en términos de “capitalización de mercado” (detrás de PetroChina y Exxon-Mobil, para que se enteren los ignorantes fiscalistas talibanes neoliberales “mexicanos”, quienes han descuartizado Pemex en similitud a los piratas oligarcas rusos), sino que también utilizó los colosales ingresos de la gasera para posicionar a su país con la tercera reserva de divisas del planeta, casi 450 mil millones de dólares, al haber desbancado a Taiwán y ubicarse detrás de China y Japón.
Nada menos que Medvedev, exitosamente fuerte con un valor de capitalización de mercado de Gazprom por 345 mil millones de dólares, prometió que en otros siete años hará que la empresa equivalga a más de un millón de millones (un trillón en anglosajón) de dólares. ¡Tal es la hazaña geoenergética global de la dupla Putin- Medvedev!
El vuelo del gas ruso apenas inicia su odisea planetaria, pues irá desplazando paulatinamente al petróleo como una de las principales fuentes geoenergéticas, debido a su mayor eficiencia y a su menor contaminación en igualdad de condiciones. Rusia entró de lleno en la Gazpromcracia.

miércoles, diciembre 12, 2007

Petróleo. Discurso de la familia feliz.


La Jornada

Los campos de fácil acceso tienen un futuro relativamente corto, dice la titular de Energía

Sin reformas está en riesgo la producción de crudo, según Kessel

El urgente diseñar instrumentos técnicos, legales y económicos para fortalecer a la petrolera

En un escenario bajo la generación caería 21% en 10 años, a 2.1 millones de barriles al día

Roberto González Amador

México enfrenta el riesgo de perder una quinta parte de su producción actual de petróleo crudo, materia prima que constituye la principal fuente de ingresos del Estado, ante la ausencia de reformas que abatan las limitaciones a la inversión en Petróleos Mexicanos (Pemex), de acuerdo con un documento oficial presentado este martes por Georgina Kessel, secretaria de Energía.

En un escenario de “inversión limitada ante la ausencia de reformas estructurales”, la producción de petróleo crudo caería en 10 años a 2.1 millones de barriles por día, 21 por ciento menos que el nivel promedio actual, según la Prospectiva del mercado de petróleo crudo 2007-2016, presentado la tarde de ayer en el Museo Tecnológico de la Comisión Federal de Electricidad.

Durante la presentación de una serie de documentos estadísticos y de prospectiva del sector energético, la titular de Energía, Georgina Kessel, manifestó la urgencia de “diseñar los instrumentos técnicos, legales y económicos” para fortalecer a Pemex, la petrolera estatal, “a fin de que se generen en el país las inversiones, la experiencia y el empleo que demandan los mexicanos”. En este sentido, manifestó tener confianza en que “junto con los legisladores que nos representan” se avanzará en encontrar soluciones a los problemas de falta de inversión en la empresa.

Kessel manifestó durante la ceremonia de presentación de los documentos que es difícil pensar en el México de hoy sin relacionar su historia con la del petróleo. Sin embargo, añadió, también es necesario pensar “en el país que heredaremos” a las próximas generaciones para vislumbrar lo que necesita esta industria.

“Si queremos seguir siendo uno de los principales actores en el entorno mundial de la industria petrolera, es indispensable que los mexicanos, como dueños de estos recursos, encontremos los mecanismos que nos permitan satisfacer las necesidades de los consumidores de hoy y de mañana, manteniendo niveles adecuados en la relación reserva-producción”, añadió.

En la ceremonia de este martes, a la que asistieron los titulares de las empresas estatales del sector energético y de la Comisión Reguladora de Energía, fueron presentados en público varios documentos relacionados con el sector: el Balance nacional de energía 2006, Anuario estadístico de la industria petroquímica 2006, Prospectiva del mercado de gas natural 2007-2016, Prospectiva del mercado de gas licuado de petróleo 2007-2016, Prospectiva de petrolíferos 2007-2016, Prospectiva de petróleo crudo 2007-2016, y Prospectiva del sector eléctrico 2007-2016. Todos se encuentran disponibles en http://www.energia.gob.mx/.

Georgina Kessel mencionó en su discurso que la prospectiva de crudo que ayer se presentó, considera dos “escenarios”. El bajo se caracteriza por una exploración restringida, postergación de la explotación de recursos en aguas profundas y la reducción de la plataforma productiva, de tal suerte que hacia 2016 Pemex producirá solamente 2.1 millones de barriles diarios de crudo.

A su vez, el escenario sobresaliente supone potenciar la capacidad de ejecución de Petróleos Mexicanos en la actividad exploratoria, el desarrollo inmediato de los descubrimientos realizados, y la consecuente perforación de pozos de desarrollo, tanto en esos descubrimientos como en reservas ya identificadas.

Establece además que Pemex cuente con suministro oportuno y de calidad de todos los materiales y servicios relacionados con las actividades de exploración, explotación, acondicionamiento y distribución de hidrocarburos.

“Este escenario mantiene un promedio de producción de 3.25 millones de barriles diarios de crudo en el periodo de estudio, alcanzando un nivel de 3.4 millones de barriles diarios en 2016, cifra 10 por ciento superior a la plataforma de producción actual”.
Añadió: “nuestros campos petroleros de fácil acceso tienen un futuro relativamente corto. Esto lo sabemos todos. Sin embargo, lo que debemos tener en mente ahora es que somos propietarios de importantes recursos prospectivos que, en su gran mayoría, se ubican en tirantes de agua superiores a los mil metros, por lo que su aprovechamiento requiere además de grandes inversiones, la realización de trabajos en condiciones sumamente complejas y, sobre todo, una multiplicación de la capacidad operativa de Pemex que sería imposible alcanzar en las condiciones actuales”.

lunes, diciembre 10, 2007

El nuevo Golfo Pérsico

El Golfo de México se convertirá en el nuevo Golfo Pérsico, solo que del lado mexicano encontramos petroleo malo tipo pesado y del lado de EU petroleo bueno o ligero, los Hoyos de la Dona por lo tanto son estrategicos para el petroleo ligero que queda mayormente y sospechosamente a favor de EU.

Con base en nuestras investigaciones que hemos hecho sobre la importancia del crudo en los llamados Hoyos de la Dona, localizados en el centro del Golfo de México, junto con un equipo de comunicadores y académicos como Fabio Barbosa, autor del libro “El petróleo en los Hoyos de Dona y otras áreas desconocidas del golfo de México”. Humberto Hernández Haddad, Alfredo Jalife, Enrique Pastor Cruz Carranza, Manú Dornbierer, Víctor Machiavelo, y Juan José Dávalos López, así como los sitios de Internet RazonesdeSer de Torreón, Coahuila; Columna Sur, de Chiapas; Red Voltaire de Francia, y LaSpecula de Italia, también los medios escritos como las revistas Contralínea, de circulación nacional; El Quijote y a Fuego Lento, de circulación regional, periódicos como Voces del Periodista del Club de Periodistas de México, y Diario de Yucatán; por lo tanto, es necesario desarrollar una amplia investigación académica, y ciudadana que abra un foro sobre este tema, porque existe la percepción de que el Gabinete de Ernesto Zedillo { y posteriormente el de Fox} cedió parte de nuestra soberanía, en esa importante parte del Golfo, a favor de los Estados Unidos, {22, 600 millones de barriles de petróleo, a valores presentes significan unos 1.3 trillones de USD, el PIB de México es de medio trillón, el PIB de USA es de 10 trillones, para que Usted ubique el daño patrimonial} los personajes zedillistas-aunque de origen salinista- ligados a las negociaciones, fueron los secretarios de relaciones exteriores, José Ángel Gurría, {ahora nombrado Director de la OCDE, y con el apoyo del Bushismo para controlar esa importante organización mundial con sede en Paris}; Rosario Green, {ahora secretaria del PRI}, Luis Téllez, entonces secretario de energía zedillista, y ahora encargado en México del fondo de inversiones Carlyle de Papa Bush y vicepresidente del grupo minero Industrial Minera México, {esa megacorporación sospechosa de haber sido la culpable del homicidio industrial de 65 mineros en San Juan de Sabinas, Pasta de Conchos y por lo tanto beneficiaria inmediata para aprovechar el gas metano de sus minas carboníferas para generar proyectos de generación de energía alterna a la CFE}; y Adrián Lajous, director de PEMEX en ese sexenio {cuya hija se ha convertido en golpeadora de AMLO}, si se demuestra que México cedió parte de esa estratégica región, {ratificada por Vicente Fox y su secretario de Gobernación Santiago Creel}, entonces habría que fincarles responsabilidades de sus acciones contra México.

Todo ello esta en el tema de la ya famosa isla Bermeja que Zedillo y sus funcionarios nunca vieron, en septiembre de 1997, a petición de la Secretaría de Relaciones Exteriores, la Armada realizó un rastreo náutico en busca de la isla en la situación geográfica latitud 22º 33′ Norte y longitud 91º 22′ Oeste, y no encontró rastros de la Bermeja.

El buque oceanográfico H-04 “Onjuku” de la Armada efectuó en el área un patrón de búsqueda de 322.5 millas náuticas cuadradas con un barrido hidroacústico, con resultados negativos, según un informe firmado por el contralmirante Néstor E. Yee Amador, director general de Oceanografía Naval, Relaciones Exteriores solicitó la ubicación geográfica de la Bermeja precisamente en las negociaciones entre Estados Unidos y México por establecer los límites marítimos para dividir el Hoyo de Dona Occidental.

Esa zona, ubicada frente a Tamaulipas y Texas, se formó a partir de los tratados de límites marítimos entre México y Estados Unidos firmados en 1978, {José López Portillo y James Carter}, tratados que no fueron ratificados por el Senado de los Estados Unidos, luego de conocer un informe de la Asociación de Geólogos Petroleros que advertía del enorme potencial petrolífero del Hoyo de Dona Occidental.

La Asociación recomendó al Senado norteamericano no ratificar el tratado con México y tratar de cambiarlo para quedarse con los dos hoyos. Veinte años después, en 1998, Estados Unidos cambió inexplicablemente su estrategia y aceptó el tratado de 1978 y propuso a México negociar otro convenio para dividir el Hoyo de Dona Occidental, a partir del mismo principio de equidistancia, tomando a Los Alacranes {en lugar de la Bermeja} como punto de referencia.

Es entonces cuando algunos investigadores cuestionan el tratado de límites de 1978 y comienzan a buscar otro punto más al Norte que le diera ventaja a México en la disputa por la Dona. De ese modo descubren mapas antiguos con la ubicación de la Bermeja que ya existía en los mapas coloniales, un mapa italiano de fines del siglo XVII o principios del XVIII, muestra claramente la identificación de una isla denominada Bermeja, {a 100 millas náuticas de las costas de Yucatán y Campeche}, enfrente de Sisal, en una posición geográfica no muy alejada de la que se le reconoció después en los mapa oficiales del siglo XX.

Uno de los críticos mas acérrimos fue el senador panista por Nuevo León, José Ángel Conchello Dávila, {quien murió posteriormente en un extraño accidente carretero} quien criticó duramente las negociaciones del gobierno mexicano con Estados Unidos para dividir el Hoyo de Dona y acusó al gobierno de Ernesto Zedillo de hacer todo para entregar la riqueza del Golfo a los norteamericanos, Conchello también se había negado a la privatización de los fondos de pensiones (AFORES).

Investigadores de la época consideraban que si la medición para fijar los límites marítimos hubiese partido de la Bermeja, ubicada un poco más al norte y al oeste del Golfo, la mayor parte de la Dona Occidental sería ahora para México.

Lo interesante es que si se toman las mismas 200 millas desde las costas de EUA, se observa mas nítidamente el despojo a México, la “Isla Perdida” la hemos localizado en el Internet en las siguientes coordenadas, Islote Bermeja, México : Longitud: -91.3666667, Latitud: 22.55

Entonces tenemos una flagrante violación a la soberanía territorial que implican millones de barriles de crudo que México deja de recibir por este “error geográfico”, por lo tanto en espera de consolidar mas información, es el momento de que la sociedad exija la renegociación de los dichosos hoyos de la dona.

En septiembre de 1997, a petición de la Secretaría de Relaciones Exteriores, la Armada realizó un rastreo náutico en busca de la isla en la situación geográfica latitud 22º 33′ Norte y longitud 91º 22′ Oeste, y no encontró rastros de la Bermeja.

{Sin embargo, entre 1940 y 1977 esta isla desapareció del mar y de los mapas inexplicablemente, aunque hay sospechas de la posible intervención de Estados Unidos para dinamitarla o al menos desaparecerla momentáneamente de las negociaciones, por afectar sus intereses estratégicos en el Golfo de México}.

Otro hoyo similar se formó en el margen oriental de las aguas profundas del Golfo, llamado Hoyo de Dona Oriental, frente a Yucatán, Nuevo Orleáns y Cuba {asunto esencial del affaire Sheraton, pues EUA mandó a Valero a negociar ese hoyo, Valero Energy de San Antonio, es parte del Clan Bush}.

Y si de islas se trata, Fox negoció la entrega de otra isla. Con absoluto sigilo el gobierno foxiano inició los trámites para concesionar por 30 años parte de las islas Coronado, archipiélago ubicado en aguas del Pacífico, para que la multinacional petrolera Chevron-Texaco instale en ese territorio marino federal una planta de almacenamiento de gas natural licuado.

Este proceso se realiza cuando crecen las protestas por las cuatro plantas de regasificación que construyen las también trasnacionales Sempra, Shell y Marathon, ubicadas entre Mexicali, Ensenada y Rosarito, en Baja California Norte. Chevron-Texaco {de donde viene Condi Rice, la Secretaria de Estado de GWB} se ubica en octavo lugar entre las diez compañías petroleras más importantes del mundo, con una producción de alrededor de 2 millones de barriles diarios de hidrocarburos líquidos, ingresos anuales cercanos a 100 mil millones de dólares al año y más de 122 mil empleados en todo el mundo.

Otro tema que fue discutido en este 18 de marzo, es el relativo al mercado negro del oro negro que se realiza en Rótterdam, Holanda, país en donde por casualidad está la matriz de la tenebrosa empresa Shell, que es la beneficiaria de la refinación de nuestro crudo que se lleva a cabo en Houston, Texas, con la complacencia del Congreso de la Unión, más interesado en sus canonjías y prebendas que en mirar por los intereses de la nación; y la critica no es así como así, veamos lo que sucedió en Conchos y lo que aprobó el Congreso, por todos sus partidos desnacionalizados, según nuestro muy buen amigo José Alfredo Gutiérrez Falcón de Monclova, Coahuila y publicada en La Jornada del día 15 de marzo del 2006: “……La reciente reforma a la Ley Minera, además de violar el artículo 27 constitucional, tiene el objetivo único de beneficiar a las grandes empresas del ramo -que en su mayoría son extranjeras-, al permitirles explotar el gas metano que se produce con la extracción del carbón, al tiempo que contiene medidas que ponen en riesgo la existencia de la pequeña y mediana industrias…. , uno de los pocos abogados especializados en litigios en asuntos mineros, quien agrega que es “muy lamentable” que a partir de la tragedia de Pasta de Cochos surjan voces del sector empresarial que plantean la necesidad de concesionar el gas que se extrae de las minas, y lo hacen “cuando tuvieron al trabajador en riesgo, sin atenderlo, mal pagado y sin equipo, y ahora quieren sacar provecho de una manera miserable” con el visto bueno de los gobiernos federal y estatal, quienes junto con la empresa Minera México y el sindicato del ramo son responsables de la muerte de 65 trabajadores.

Y continúa diciendo……. Subraya que la reforma recién aprobada es inconstitucional, y que para su aplicación se requiere necesariamente que sea modificado el artículo 27 constitucional -no sólo la ley reglamentaria, como hicieron los legisladores-. El litigante señala que la prueba de que existe un contubernio entre las grandes empresas mineras, el gobierno federal y el estatal, así como PRI y PAN, es que en los años recientes las grandes compañías mineras “denunciaron” millones hectáreas en la zona carbonífera de Coahuila ante la Dirección de Minas de la Secretaría de Economía -es decir, que reclamaron la explotación comercial de esos terrenos-, y ahora resulta que con la nueva regulación fueron las primeras beneficiadas; agrega que los legisladores exhibieron gran falta de sensibilidad al aprobar que ya no se publique en el Diario Oficial de la Federación la cancelación de los títulos mineros, “porque quién se va enterar, si el Diario Oficial era la única defensa que tenía el minero para salvaguardar sus concesiones y respaldar sus denuncias".

Por eso la “DEMOCRACIA” que tenemos, que sólo es una PARTIDOCRACIA, KAKISTOCRACIA, CLEPTOCRACIA, MEDIOCRACIA y PLUTOCRACIA, todo junto con lo que LA REPUBLICA Y SUS LEYES de Platón queda sonrojada por lo que sucede en nuestro querido México.

Otro tema importante en estos días es explicarnos el porque de la rebaja de crudo de México hacia Estados Unidos En un escenario en el que la infraestructura de refinación resultó severamente afectada, Petróleos Mexicanos (Pemex) determinó un ajuste unilateral y generalizado en los precios del crudo de exportación a partir de noviembre {2005}, debido a que los huracanes Katrina y Rita generaron una reducción en la demanda y una sobreoferta de crudos amargos, informó este sábado la paraestatal. Pemex que se estableció un decremento de 2.25 dólares por barril para el crudo Maya que se destina a la Costa Oeste de Estados Unidos. También fijó una reducción de 1.85 dólares al precio por barril del crudo Maya de exportación para el continente americano, donde las compañías petroleras de Estados Unidos concentran alrededor de 80 por ciento de las ventas totales. En el caso del Istmo y el Olmeca para esta región, las disminuciones serán de 40 y 30 centavos por barril, respectivamente. Con estos ajustes a la baja, la empresa dejará de percibir al menos mil millones de pesos mensuales.

Mientras que Estados Unidos se aprovecha, desde los Acuerdos de Bucareli del 13 de agosto de 1923, en donde México se abstenía de refinar sus crudos, todavía tenemos la desvergüenza de descontarles nuestros precios de nuestras materias primas, que pertenecen al sector primario; todavía el crudo de exportación, de acuerdo con nuestra nomenclatura, es parte del sector minero.

Y por otra parte, el Presidente Fox, agobiado por el anti-depresivo que toma, (el PROZAC, que le ha mermado sus capacidades intelectuales) sigue anunciando descubrimientos increíbles de petróleo en la zona de Chicontepec{Veracruz}, de un petróleo de mala calidad y a costos muy elevados de extracción, mientras la British Petroleum (BP), quién dice que junto con Uzbekistán, México ocupa uno de los últimos lugares del mundo por la disponibilidad de reservas probadas de petróleo de los países productores, pues cuenta con recursos suficientes para sólo 10.6 años de la producción actual, según la Revisión Estadística de la Energía Mundial 2005 elaborada por la petrolera británica British Petroleum (BP), una de las más grandes del orbe, en términos concretos, el país presenta una drástica caída en las reservas probadas, pues de 56 mil 400 millones de barriles que había en 1984, pasó a 49 mil 800 millones una década después; esto es, una baja de 11.7 por ciento.

Sin embargo, la mayor merma se resintió entre 1994 y 2003, cuando las reservas bajaron 67.8 por ciento, para ubicarse en sólo 16 millones de barriles {la sobre-extracción de crudo y el sobre-endeudamiento con PIDIREGAS}, en diversos foros, Petróleos Mexicanos ha explicado que buena parte de esa reducción se derivó de la aplicación de nuevos métodos de cálculo, en particular, los utilizados por la Securities and Exchange Comission (SEC) de Estados Unidos, que únicamente reconocen como reservas probadas aquellas susceptibles de ser explotadas comercialmente.

Además, ha reconocido la paraestatal, eso se derivó también de falta de inversiones en proyectos de exploración, aunque hay lo sospecha de que la Shell, es la beneficiaria, {al igual que Repsol en Bolivia} la socia de PEMEX desde que esta empresa holandesa, estaba bajo la órbita de los nazis de su director Henri Dettering y sus relaciones peligrosas con el naciente gigante PEMEX, lo que queda demostrado en la coinversión para refinar crudos que ambas tienen desde 1993 en Deer Park de Houston, lo cierto es que de acuerdo con las estadísticas del documento de British Petroleum, las reservas de crudo de México registraron una caída casi vertical de 73.7 por ciento en las últimas dos décadas.

El desmantelamiento de PEMEX es brutal, no obstante ser la primera empresa mundial con base en sus ingresos brutos, mientras que el 35% de los ingresos presupuestales públicos-impuestos, derechos y aprovechamientos- {federales, estatales y municipales} vienen los ingresos petroleros, ES UN SAQUEO TOTAL, DESCARADO Y CORRUPTO de la riqueza de la Nación, así, parece que las aportaciones de Pemex constituyen el principal sostén fiscal del gobierno federal. El pago de los diferentes gravámenes aplicados a la empresa más que duplicaron la recaudación obtenida a través del impuesto al valor agregado (IVA) y rebasó en más de 57 por ciento a los ingresos por la aplicación del impuesto sobre la renta (ISR), durante 2005 y luego el consumidor es saqueado también con impuestos dobles, IVA y IEPS, sólo para beneficio de una clase dirigente extremadamente corrupta e ineficiente y lo peor, totalmente desnacionalizada.

CONCLUSION. (1) Necesitamos empezar una campaña para renegociar los Hoyos de la Dona y la concesión sobre Isla Coronado. (2) Repudiar la deuda en PIDIREGAS, que es deuda contingente, no aprobada por el Congreso. (3) Fincar responsabilidades a los funcionarios zedillistas y foxistas por lo de la Isla Bermeja. (4) Renegociar con la Shell y su refineria en Deer Park de Houston, las utilidades que le corresponden a México. (5) Ver quiénes son los beneficiarios mexicanos del Mercado Negro de Rótterdam, que en gran parte se surte de petroleo mexicano. (6) Cambiar la estrategia fiscal sobre nuestra mayor empresa nacional y acabar con la doble tributación hacia el consumidor final. (7) Empezar a negociar los net-backs {regalías} con Shell y Valero Energy quienes son los grandes refinadores de nuestra materia prima vital. (8) Investigar todas las operaciones off-shore de PEMEX, incluidos los 18 Hedge Funds con Enron-Carlyle, Valero, Shell, Phibro de Citibank y Merrill Lynch. (9) ingresar a la OPEP -la unión hace la fuerza-. (10) Generar ingresos hacia la población con nuevos Petrobonos, en lugar de los Contratos de Servicios Múltiples y los Pidiregas, que el financiamiento venga del pueblo mexicano, no de los grandes consorcios petroleros y gaseros,aliados con corruptos mexicanos, que buscan la privatizacion,desregulación o descontrol de nuestra mayor empresa.

Esto lo debe impulsar la sociedad civil y los medios críticos de lo que sucede en diversos ámbitos energéticos, lo único que nos mantiene como nación es la todavía SOBERANÍA ENERGÉTICA, y es a partir de ella que debemos replantear que todos esos ingresos extras sean canalizados por EUA hacia el NADBANK, de San Antonio, Texas para detonar proyectos regionales de desarrollo en las zonas expulsoras de población, que dicho banco permita la participación de las organizaciones civiles mexicanas especializadas en temas energéticos y que también permita apoyar a nuestras comunidades en los mismos EUA.


por Juan Ramón Jiménez de León

* Economista con estudios en Chicago, San Antonio y Nueva York. Académico de la UNAM, Premio Nacional de Periodismo 2003

viernes, diciembre 07, 2007

jueves, diciembre 06, 2007

Película de terror en cuatro episodios.

La Jornada

John Saxe-Fernández http://jsaxef.blogspot.com

BM: Pilatos previsor

La crisis institucional de la pax americana se suma, junto con la energía, la pobreza y el calentamiento global, a la agenda contemporánea. Nuevas opciones financieras regionales (arreglo Chi Mai o el Banco del Sur), así como la pérdida de 88 por ciento de la cartera de préstamos del FMI desde 2002, y de 42 por ciento que afectó al Banco Mundial (BM) desde 1996, así lo indican. Agréguese la debacle moral y de derecho penal internacional, por más de un millón de bajas civiles en Irak y crímenes de guerra a granel, y se comprende lo difícil que es ocultar una criminalidad de Estado en la cual el BM, la CIA, el Pentágono y el FMI han sido pieza central.

En México, cual Pilatos previsor, el BM se lava las manos de cara a 2008. Dice que “le preocupa” la polarización social (La Jornada, 4/12/07, primera plana) y días antes se alarma por el “índice de desestabilización”. Los “índices”, parte de sus herméticos manejos estadísticos, no apantallan a una opinión pública que padece los resultados de los programas privatizadores, de ajuste estructural y de apertura comercial impulsados por el BM y sus country managers que operan desde Los Pinos y Hacienda.

El lobo se dice inquieto por el bienestar y la seguridad de Caperucita, días antes de la cadena de zarpazos de 2008 pactados en el TLCAN contra millones de productores de maíz, leche, carne y frijol.

A lo largo de 25 años, el BM y FMI han jugado un papel central en la inducción de condiciones micro y macroeconómicas que afectan al aparato productivo, el empleo y el bienestar social, lo que, según Joseph Stiglitz, ex economista jefe del BM, se realiza en cuatro etapas (Memoria, junio de 2002): el paso uno “… puede llamarse con más precisión la sobornización”, es decir, el uso de empréstitos y otros dispositivos “para lograr la adhesión de presidentes y ministros para que, en lugar de oponerse a la venta de las grandes empresas estratégicas de gas, electricidad, petróleo, puertos o ferrocarriles, se inclinen a liquidarlas alegremente”.

Con las exigencias del FMI como excusa, “podías ver cómo se les abrían los ojos ante la posibilidad de una comisión de 10 por ciento, pagada en cuentas suizas, por el simple hecho de haber bajado unos cuantos miles de millones el precio de venta de los bienes nacionales” (p. 15). La venta de garage salinista (que algunos taimados “de izquierda” aconsejan seguir en Pemex por medio de contratos riesgo), valorada entre 23 y 26 mil millones de dólares, superó las privatizaciones de Yeltsin, hechas bajo impulso de EU en medio de “oleadas oligárquico-etílicas”, rematando grandes empresas energéticas, ahora recobradas.

Al segundo paso Stiglitz lo denomina “el ciclo del dinero caliente”, o sea, la “desregulación” del sector financiero, pactada por Salinas y Zedillo con el FMI para que especuladores y empresas extranjeras puedan repatriar dólares a su gusto. Así se prepara el terreno para grandes despojos, usando además instrumentos “novedosos” como el “mercado mexicano de derivados”. El Plan Brady, por su parte, facilitó a Wall Street inflar el “mercado emergente mexicano” mutando decenas de miles de millones de dólares de dudosos bonos de la deuda en valores comerciales “respetables”, al amparo de papeles del Tesoro estadunidense a 30 años: para Salomón Brothers, Meryll Lynch, Citibank, J.P. Morgan et al, las ganancias fueron fabulosas en medio de risas y champaña. La hilaridad fue mayor cuando el secretario Gurría afirmó, días antes de la macrocrisis de 1994, que la Ronda Uruguay “y la firma de acuerdos comerciales de México, en particular el TLC… ofrecerán a nuestro país un entorno favorable que debe aprovechar para sustentar el crecimiento futuro en el comercio y la inversión, alejando con ello la amenaza de otra crisis de sobrendeudamiento”. Lo cierto es que en cada ciclo “neoliberal” aumentan desempleo, despojo del patrimonio y millones migran a EU en busca de empleo.

El paso tres consiste en una desestabilización sociopolítica tal cual, pues con políticas recesivas se ataca la economía popular al alentar desempleo e “informalidad económica”, con su sector punta: el crimen organizado y el narcotráfico. A sabiendas de las consecuencias se reduce la inversión pública social y productiva, se retiran subsidios a la agricultura, se arrasa con los contratos colectivos, acelerando los despidos y acentuando la distribución regresiva del ingreso, se impulsa el alza en el precio de los combustibles (gasolinazo) y se ataca la canasta básica. Esto da lugar al paso “tres y medio” de Stiglitz: “los disturbios sociales inducidos por el FMI”.
Paso cuatro: con la nación “caída y en desgracia”, el FMI y el BM “se aprovechan y le exprimen hasta la última gota de sangre. Incrementan el calor, hasta que la olla entera explota”. (p. 15-17). En este contexto, con aval de Calderón, EU despliega sobre territorio nacional su sombrilla de seguridad (ASPAN-Iniciativa Mérida-contratistas/mercenarios), mientras sus empresas, con nuevos apoyos, se lanzan sobre “los bienes restantes” (petróleo, electricidad) “… a precios de remate”.